El proyecto de distribución de agua en el Chaco, liderado desde Loma Plata, ha logrado llevar agua potable a más de 70.000 personas, beneficiando especialmente a 45.000 habitantes de comunidades indígenas. La infraestructura clave incluye acueductos que conectan Loma Plata con Filadelfia, Neuland y Lolita, así como una aductora hasta Pesempoó.

El proyecto se estructuró en cinco frentes, abordando diferentes tramos y ciudades, con énfasis en eficiencia y sostenibilidad. La supervisión integral abarcó desde el cumplimiento del contrato y control de plazos hasta la evaluación de métodos de construcción y calidad de materiales.

Esta iniciativa, más allá de la mejora de la infraestructura, representa un compromiso serio con el bienestar de las comunidades y el entorno. El acceso mejorado al agua potable marca un hito significativo en la calidad de vida de los habitantes del Chaco.